Mezcla de cosas, ensalada en el corazón, en el alma, en la cabeza, en los brazos, en el cuello, en la garganta, en el dedo pequeño del pié
Chacabuco está aun en pie, menos que antes, menos que cuando me conoció por primera vez. Todo salió buenísimo, la comida, el asado, la gente, ustedes, Rossini, el publico, hasta el polvo regente del desierto que insistía en que nuestra ropa hiciese juego con él Conocí tambien la puna y mi rostro luchó para no contraerse por los pequeños errores que sonaron en el concierto (estas dos cosas serían lo malo + tú que no sé por qué de repente te apegas a mi si poco me conoces y me conversas, no tengo problemas con eso pero por qué parece que hay una intención; eso no fue malo pero incómodo si)
Recuerdo nuestras 4 cabezas asomadas complicadamente desde debajo del escenario
También grande alegría por ustedes dos, que son libres, sin ataduras de "no, si nó" Es algo tán tán perfecto, tán parsimonioso, como dijiste por messenger, es como un descanso, como un equilibrio, como un regocijo que desborda y hasta me alcanza y me hizo partícipe de su alegria cuando me contaste, y tú que levitabas sonriente esa mañana después de poquitas horas de sueño de las que despertaste llena de energía cuando salió el sol denuevo (podía imaginarte así); pucha que te costó entenderlo, pero era inevitable, y hasta no fué extraño, pasaría en estos días, solitarios.
¿Como expresarlo? Querría abrazar a ustedes dos y todo lo que los rodea y se relaciona con ustedes, su historia y su presente y su futuro, como si fuese una gran burbuja, su realidad jaja. Si, los quiero y soy feliz si son felices