lunes, 21 de diciembre de 2009

ideas que me surgen de una velícula (alto peligro de cursilería)

Hace unos días fuí a ver Avatar, la película de James Cameron. Ocurre que los Na'vi, los seres humanoides que habitan el planeta Pandora, según la trama, viven en un notable equilibrio con todos los seres vivos de su mundo, de hecho, existe casi como una red "neuronal" que cubre todo el planeta, en que los mismos árboles harían las veces de células. Los Na'vi pueden conectarse directamente a esta red mundial-biológica a través de unos "terminales" en el extremo de sus "trenzas", conectarse a los árboles y animales (los últimos también poseen terminales) y crear una especie de conciencia mundial en la que todo forma una sola criatura. A partir de esto -que no es más que una película- me puse a divagar sencillamente sobre la situación nuestra. Lo que nos falta es esa capacidad de sentir todos lo que pasa, nos falta una conección con la naturaleza y darnos cuenta de lo que estamos haciendo. Somos aún, evolutivamente, muy individuales; necesitamos dejar de ser tán "nosotros" y ser más "mundo", sólo así de verdad podríamos hacer algo. Aunque los Na'vi finalmente logran defender Pandora de los "hombres del cielo", los seres humanos que vinieron a destruirlo y minar sus riquezas, queda la sensación de que seguirán llegando desde la Tierra, en manadas imparables... así es como seguimos nostros contaminando y destruyendo la Tierra: aunque exista ya consenso entre muchas personas sobre el calentamiento global seguiremos destruyendo inexorablemente lo que tenemos, y es que en el fondo lo necesitamos, ya somos billones y tenemos la obligación social de alimentar todas esas bocas nuestras y evitar la muerte, un instinto de supervivencia voraz que impulsa a consumir los recursos de manera irresponsable y que no es sustentable. Creo entonces que es extremadamente difícil que resolvamos el asunto, somos como un niño pequeño que sabe que será castigado por comerse todos los chocolates pero que no tiene la voluntad suficiente para ver lo que sucede y poder detenerse. Es cuestión de ver los resultados de Copenhague. La única solución es que espontáneamente todos los seres humanos se detengan, se miren entre sí y sin decir palabra olviden todas las cosas carentes de relevancia y cambien la situación, limpien el mundo, dejen de quemar energías sucias, dejen sus autos, etc, sin la negra presencia del dinero en los bolsillos y en las mentes... eso es, olvidar el dinero, las monedas y los billetes, transformarlos nuevamente en el metal que surgió de la tierra y en el papel que surgió de los árboles; y detener una final extinción de la especie. Estoy hablando de que los seres humanos olviden sus culturas y religiones, intereses y objetivos a escala local, dejen de ser "personas" y nos transformemos subitamente en un ser a escala mundial, un único ser, todas las mentes funcionando como una sola: a esa escala ya sólo la vida es relevante, el equilibrio se hace evidente, así como su inestabilidad, y se consigue finalmente la paz y la felicidad como seres vivos de este planeta. Es una nueva escala en la evolución, la variante que sellaría por fin la necesidad de evitar nuestra autodestrucción y la necesidad de seguir alimentándonos, porque hemos demostrado que no somos capaces de hacerlo con los medios intelectuales y biológicos que poseemos en estos momentos. Pero hoy no veo mucha esperanza. No sé qué pasará en el futuro de mi vida, cuando ya sea anciano... no sé como estará la situación. Es cuestión de tiempo.

lunes, 14 de septiembre de 2009

Natalie Dee



Nada especial. Intruseando archivos viejos encontré algunas cosas y recordé otras, como esta página
http://www.nataliedee.com/archives/2009/Sep/
hay cosas graciosas, derepente.

Esta semana:
-Ensayo con el Coro de Lejos
-Ensayo con Palestrina
-¿Ensayo en la UA?
-Leer mucha materia de Geoquímica Endógena
-El jueves despedir al Angelo con los demás en el Boliche
-Ir a clases, las que los profes se decidan pajeramente a hacer
-Buscar info. sobre los Pterodactilidae para la defensa al final de semestre
-Hacer nada, cocinar, dormir, llamar a los tíos, que ya se fueron al sur y nunca los fuí a ver, pero sí los llamé ññññ!

Eso.
ºLº

martes, 4 de agosto de 2009

Hiems

..............................¿escuchan?
.........................¿pueden oir?
está lloviendo.
El viento llegó en la tarde
llegó luego la oscuridad arrastradas por colosos cargados de agua que cubrieron majestuosos el cielo arrebolado
luego el cielo fué también rojizo, pero no ya por el sol, sinó por la luz de la ciudad, la noche se hizo luminosa y cerrada.
Pronto comenzaron a caer
caer
caer
¿escuchas?
golpean contra el suelo, se desparraman, pequeñas.
Más seguido, más frecuente...
............la canaleta...... ahora el agua acumulada cae de la canaleta,
adentro la estufa calienta el espacio, hay luz y es cálido entre los géneros, verdes, naranjas, blancos y libros y muebles amables que te invitan a sentarte.
Seguirá así por la noche. Dormiré con el ruido del agua
el agua
el agua
el

viernes, 5 de junio de 2009

Ahora que despiertas
Todo parece diferente
Miro alrededor
Pero no hay nada en absoluto

Descalzo, entonces me doy cuenta
Que ella está todavía en pijamas
Luego me encuentro en un sueño
Cuelgo de un anticlímax

Ella está con el sol
Y está aquí, aquí dentro

Pero, ¿dónde estás...?

Voy de viaje
Y deambulo por las calles
No puedo ver la salida
Así que uso las estrellas
Ella se sienta eternamente
Y luego se va

Sol, resplandeces como ella
Entonces sal...

Despierto del sueño oceánico
Mi corazón late
Mi pelo revuelto...

Y aquí estás...

Puedo sentirlo...

Y aquí estás,
Sol resplandeciente...

Y aquí estás,
Sol resplandeciente...

Y aquí estás,
Sol resplandeciente...

Y aquí estás...

jueves, 4 de junio de 2009

escondido en mi pieza

No se puede estar bien todos los días. Hay días en que, si bien son similares a los demás, uno parece fijarse más en esos pequeños detalles tristes que rellenan los ratos circulares, sumado a situaciones incómodoas y asuntos lamentables o desagradables (creo que hay uno que me circunda en especial este día) hacen que esa sensación de algo oscuro y denso que te aplasta un poco el pecho y te corta el aliento vaya creciendo más de lo que normalmente está. Uno no lo toma en cuenta, sabe que está ahí pero también sabe que no hay que pensarlo porque eso le da vigor.
Entonces luego, al salir de una evaluación largamente esperada y temida además, que te quitó tiempo de "esparcimiento" y con cuyo resultado no te sientes aliviado, la sensación se convierte en frustración evidente y caminas rápido hacia algo con lo que te puedas desahogar. Pero una vez allí no te sirve, no te sientes "dentro", eso te frustra más, y parece que tu propia aura espantara a los demás... no, no es mejor, no ayuda, empeora de hecho.
Te vas a casa, caminas solo -pero si eso es normal- pero no hoy. Llegas, comes algo y cierras la puerta. Es tu madriguera, mi madriguera. veamos si la música alivia un poco, al fin...
Hoy es un día en que sí me quisiera esconder en el bosque, para no ser encontrado -luego de no lograr que me encontrasen- por un rato. Sin embargo no hay bosque aquí. Sólo tengo estas cuatro paredes, y no me siento cobijado por ellas.


Esto si ayuda más.

Mañana es un nuevo día.

lunes, 27 de abril de 2009

el calentamiento global


El otro día amaneció despejado y Chickenface parecía no encontrar obstáculo en la atmosfera para quemarnos vivos... bueno, eso es pan de cada día,
pero...
luego de almorzar me posicioné sobre la cama de manera que mi cuerpo entero quedara apoyado en la blanda superficie de ésta, esto es, en la dirección preferencial longitudinal, y me dormí.
mas tarde cuando me levanté...
Miento.
No estaba acostado en ninguna cama, estaba en clases. En clases de Exógena o de Cristalografía no lo sé, a ver, era... era... mmm... era... esto fué un día viernes en la tarde, después de almuerzo, entonces era Cristalografía - AH! - si, y recuerdo que me quedé dormido en la silla al menos por un momento y luego salí a labarme la cara para despejarme, como 15 minutos antes de que terminara la clase, que horrible: lavarse no es laBarse, es laVarse, siempre me equivoco con la V-B, bueno, la cosa es que después de clases salí medio zombie y me encontré con un cielo nublado.
-Así deverían ser todos los días- le dije a alguien que deve haber sido la Paulina.
A la salida de la U, porque deben saber que... no, después de Cristalografía... no, a la salida de la U me encontré con Israel. Me dijo que tenía que ir a prueba de sonido con los VVs (Vestidores Varones, el grupo parrandero de "rock huachaca" como ellos se definen donde toca él de tecladista hace como muchos años) en Sala Murano, Mall Plaza Antofagasta. -¿Qué tienes que hacer ahora?- me preguntó. -Está bien, te acompaño- le respondí yo. En realidad el diálogo fué más largo y completo pero así es más divertido y el resto no es importante. La cosa es que nos fuimos en coleto pa' allá, donde esperamos un rato a que llegaran los demás y luego llegó Kote, mi amiga, polola de Israel, probaron los instrumentos, tocaron temas y me pidieron que grabara uno con mi cámara digital Canon Power Shot A550, grabación que no se escuchó bien, como pasa con ésta máquina fotográfica que es para eso, fotografías, no para grabar, pero de todas maneras sirvió. Luego resulta que los tres -Israel, Koté y yo- nos fuimos del mall caminando a casa del Maestro Gabriel (Kote o Koté sirve igual, es un apodo informal y no hay manera correcta de escribirlo, pero si le hacemos un análisis podemos ver que es palabra aguda y que termina en vocal -e, por ende NO deviera llevar acento, pero esto no importa), el director de la Coral de Cámara Palestrina de la cual formamos parte nosotros tres, pues teníamos ensayo esa tarde (Kote también se puede escribir Cote). para ese entonces el cielo ya estaba muy nuboso y hasta neblina había muy cerca del suelo, la humedad seguro era de más del... ¿para qué chamuyo? digamos que estaba húmedo el aire. Cuando llegamos ya estaba oscuro y, más encima, la electricidad se había cortado varias cuadras alrededor y hacia el sur de la ciudad, por lo que dudamos de si realmente habría o no ensayo, pero hubo. La gente llegó y al rato la luz regresó, cantamos harto y el Maestro me golpeó varias veces porque se le metió en la cabeza que yo soy algo así como el foco del desorden, bueno, sí, soy desordenado y distraigo, pero en esta oportunidad estaba bastante sosegado, segun yo. La cosa es que comenzó a caer una fina lluvia que no eran gotas de verdad sinó más bien un rocío espeso que se fué acentuendo con el paso del rato. Y cuando al fin terminamos nuestra sesión de canto salimos en grupo como siempre a la calle y una vez allí se iluminó espontáneamente el cielo con un resplandor blanquiazul eléctrico, media cuadra más allá estallaron dos transformadores de los postes con gran estrépito y pirotecnia, cortándo la corriente denuevo y asustándonos, y para terminar un nuevo resplandor en el cielo. Cundió el pánico por un segundo, luego alguien dijo (parece que fué Israel) que había que correr rápido a tomar la micro y eso hicimos, nos despedimos en la esquina rápidamente de los que seguían a pie y nos refugiamos como pingüinos en la última fila de asientos, nos miramos con esas caras que dicen "¿¡Viste...!?" o que dicen "¡Uhhh!" y comentamos los acontecimientos, barajando teorías electromagnéticas y meteorológicas que explicaran el fenómeno, hasta un concierto de Europe que se estaba realizando unas cuadras más arriba en el estadio Sokol de los croatas estaba entre las posibilidades, aunque estos no son ni meteorológicos ni electromagnéticos, o quizás si, habría que preguntarle a sus seguidores o a su club de fans, que es lo mismo pero en distintos grados.
Eso.

viernes, 6 de marzo de 2009

la familia



Es una pequeña pieza tallada en piedra. No sé que piedra. En ella se ven cuatro figuras: la principal es un adulto (mujer? hombre?... mujer) que rodea entre sus brazos a las otras, que son un par de ninos, uno a cada lado, una tortuga y una serpiente. En el medio hay un corazón.

Fanny gracias por acordarte en Perú!

sábado, 17 de enero de 2009

alivio


Verano en Antofagasta. Los días de sol quemante, luminosos, ventosos, largos...Las cosas han ido terminando de a poco. Se fueron las clases, se fueron los ensayos, se fueron las pruebas, sólo fala despedirme de mis amigos e irme yo. Irme a casa para luego irme denuevo, pero con ellos -mis padres- y más al sur, otra vez. Las cortas pero necesarias vacaciones para terminar con este año demente lleno de cambios, cosas muy buenas, cosas no tanto, cosas malas. Este año las cosas se establecieron en mi mente y a mi alrededor y la vida aquí decantó al fin para hacerse real, mostrando todas sus caras. En algún momento me sentí desarraigado, sentía que estaba en el aire en este lugar, sin nada a qué aferrarme y que aunque mi casa aún estaba en Santiago tampoco estaba dentro de mis posibilidades regresar allí, es una sensación desagradable. Pero ya pasó, o lo asumí. Además, como lo comprendí luego, yo pertenezco a mi casa, a mi familia y si, si puedo regresar a intentar algo completamente nuevo, pero eso es sólo lo último y más radical que podría pasar, y en este momento esos no son mis planes. Así que (aunque pareciera que no es así pues aún estoy acá) acaba de comenzar un año nuevo con 365... no, 348 días llenos -o no- de cosas por hacer. Y no estoy solo.

Eso.